A fines de marzo de 1997, observadores de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) del aeropuerto Chacalluta de Arica, fueron testigos de la aparición de fenómenos aéreos anómalos durante dos noches consecutivas, hecho que despertó gran curiosidad en la opinión pública y en los medios de comunicación. A esto se sumó el reporte de pilotos comerciales y militares, quienes con anterioridad habían reportado la intromisión de fenómenos luminosos en su trayectoria de vuelo, sin que constara en los servicios de control de tránsito aéreo respectivos la existencia de vuelo alguno en el sector.
Ante el revuelo causado por tales observaciones y el posterior comunicado de prensa oficial que la Dirección General de Aeronautica Civil (DGAC) difundió, reconociendo la veracidad de los reportes realizados en Arica, la autoridad aeronáutica advirtió la necesidad de crear en su seno un organismo que se preocupara de recopilar la información de las observaciones que se estaban produciendo en el espacio aéreo controlado por Chile y que cada cierto tiempo trascendían a los medios.
Con la misión de indagar estos incidentes, nació el año 1997 el Comité de Estudios de Fenómenos Aéreos Anómalos, CEFAA, con funcionamiento y dependencia de la Escuela Técnica Aeronáutica (ETA), organismo que más tarde, el 1 de enero de 2010, junto con trasladarse al costado sur del Museo Aeronáutico y del Espacio (MNAE) pasó a depender de la Secretaría General de la DGAC.
(Extraido de la web oficial del CEFAA)